ACTIVIDADES PARA RESPIRAR BIEN
Sabemos que, en algunas ciudades, es prácticamente imposible mantener los grupos de Yoga Infantil debido al COVID- 19. Sin embargo, en muchas otras tenemos la opción de hacer grupos burbuja, de unos 5-6 niños y niñas, lo que nos llena de esperanza.
Con las recientes medidas de seguridad, adultos y pequeños nos hemos tenido que acostumbrar a estar mucho tiempo con la mascarilla puesta, lo que puede provocar que respiremos de manera más superficial y entrecortada.
Por eso creemos que ahora, más que nunca, es importante que sigamos ofreciendo yoga, siempre respetando la normativa y adaptándonos a las circunstancias.
En el número de este mes, queremos ofreceros algunos ejercicios específicos que pueden ayudar a los niños y niñas a respirar profundo y moverse de forma que suelten el estrés acumulado, liberen su cuerpo de tensiones y puedan hablar libremente de cómo están viviendo ellos la pandemia. Estos ejercicios están pensados especialmente para peques de 2 a 6 añitos. Vamos allá:
IMAGINAR A QUÉ HUELE…
Éste es un recurso que les encanta. A través del juego y prácticamente sin darse cuenta van a empezar a respirar profundamente, incluso aunque tengan que llevar puesta la mascarilla. Comenzaremos diciéndoles que vamos a hacer un viaje imaginario por el país de Hansel y Gretel. Nos situamos en un bosque verde y frondoso y olemos las copas de los árboles y la hierba. Vamos caminando descalzos hasta que vemos a un zorro escarbando la tierra. Nos ponemos a escarbar con él y nos olemos las manos, ¿a qué huele la tierra mojada? Seguimos caminando y observamos al fondo una casita de chocolate y galletas, mmmm, ¡huele como una tarta de cumpleaños! Inspiramos el aroma del chocolate caliente. Llamamos a la puerta y aparecen nuestros amigos Hansel y Greter. Hansel tiene un gorro hecho de mandarinas, y Gretel está comiendo una manzana con caramelo.
Éste es sólo un ejemplo, podemos introducir las modificaciones que queramos, en función de los olores que queramos trabajar. Lo importante es que nos detengamos unos segundos a oler en profundidad y les hagamos preguntas para que se sientan partícipes de la actividad.
RESPIRAR CON UN PELUCHE
Podemos pedirles que se traiga cada uno su peluche a clase de yoga. Tumbados, con la luz tenue, les indicamos que se coloquen el peluche en el vientre. Vamos a llevar a nuestro peluche por un camino repleto de montañas. Cuando inspiramos y el vientre se hincha, nuestro peluche favorito sube la montaña. Cuando espiramos, el peluche baja y se baña en un lago. Podemos inventarnos cualquier otro escenario, lo importante es que lleven a su peluche a alguna aventura que les guste y que, con la excusa, hagan inhalaciones y exhalaciones largas. Si están en un espacio de clase cerrado, pueden hacer la actividad perfectamente con mascarilla.
ASANAS CON TELAS DE COLORES
Las telas de colores les encantan y les ayudan mucho a relajarse y soltar tensión. Podemos colocárnoslas en las manos, cogerlas con los pies, intentar sostenerlas con la cabeza, o debajo de las rodillas, etc. La idea aquí sería repartir dos telas de colores a cada alumno/a, y realizar asanas encadenadas como: ir de Tadásana a Uttanásana con las telas en las manos, por ejemplo, pasar de Virabhadrásana II a Utthita Trikonásana, o girarse en Ardha Matyendrásana para cambiar de lado, sosteniendo la tela en su cabeza. Cualquier combinación de asanas que se nos ocurra para que muevan las telas en el aire estará bien. Si acompañamos los movimientos con una historia o cuento que llame su atención, mejor que mejor.
Y vosotras/os, ¿Cómo os las estáis ingeniando para seguir con vuestras clases de Yoga infantil?
Nuria, Formadora Auxiliar de la Escuela